El ciclo OW ha supuesto un antes y un después en mi forma de pensar y de actuar en el trabajo, poniendo a la luz importantes herramientas que estaban ahí, pero que no conocía.
Gracias a la metodología OW, he reflexionado sobre las relaciones jefe – colaborador, y he observado de una forma práctica y eficaz la evolución de mis pautas de comportamiento. Ahora me planteo más retos profesionales.